La situación de este instrumento sobre su tribuna sustentada por una columna única, le otorgan un aspecto de especial atractivo. Parece ser una situación no hallada en ningún otro lugar del mundo. Este órgano se construyó aprovechando algunos elementos de un instrumento anterior, obra de Gregorio Zabala (1666). La caja actual fue realizada entonces por Lorenzo Rojo, vecino de Piña de Campos, colocada sobre el «pié de gallo» obra de Lorenzo Hortiz.

Este órgano se conservaba bastante mal. Presentaba tubería de hechuras muy diferentes, en muy mal estado de conservación: tubos rasgados y pisados. La fuellería estaba completamente inoperativa. El trabajo de restauración consistió en apeo, limpieza y restauración de la tubería, y en limpieza y puesta en marcha de la máquina del órgano con fuelles provisionales alimentados por una turbina eléctrica, tal como ahora lo encontramos. El secreto y la fuellería de Antonio Ruiz Martínez, están aún sin restaurar. Por esta razón, presenta algunas anomalías funcionales (repasos de viento, cada vez más importantes). La tubería fue remoldeada, clasificada por hechuras, soldada y añadida hasta recuperar su longitud original.

Federico Acitores